En los últimos años ha aparecido un concepto emergente que intenta definir la realidad actual de ciudades como la de Barcelona. Se trata de «Smart City», término que se traduciría como «ciudad inteligente» y que se refiere a un tipo de desarrollo urbano basado en la sostenibilidad que es capaz de responder adecuadamente a las necesidades básicas de instituciones, empresas, y de los propios habitantes, tanto en el plano económico, como en los aspectos operativos, sociales y ambientales.
Del 9 al 13 de marzo se celebró la 27ª edición del Saló de l’Ensenyament de Barcelona que, tanto por iniciativa individual de muchos de sus stands, como por la imagen general que creemos que se quería dar desde la organización, hacía pensar mucho en ese concepto de smart city. ¿Cómo ser una Smart City sin cuidar sus cimientos? Esos cimientos deben ser sus ciudadanos y su educación y en un evento como este las generaciones que vienen detrás de los que ya estaremos en la treintena o cuarentana deben poder ver las opciones que les ofrecen para la sociedad del futuro y las ciudades del mañana.
Además, como cada año y a 3 meses de las pruebas de acceso a la universidad, este evento sigue sirviendo de “escaparate” de las numerosas opciones que los estudiantes tienen para estudiar una vez finalizado el bachillerato. Pero no solo ellos encuentran oferta formativa allí, como cada año se ofrecen distintas opciones sociales, artísticas o científicas para quien desee especializarse ya en el bachillerato, ha iniciado uno que no le convence o aquella persona que dejó de estudiar hace poco o mucho tiempo y desea volver a hacerlo.
Al Saló se suma desde hace 14 años FUTURA, donde se dan a conocer las distintas opciones de másteres y posgrados a los que optan los estudiantes ya graduados en alguna carrera.
Ambos eventos no se mantienen ajenos a las constantes innovaciones a la hora de exponer contenidos y, sobre todo, las escuelas que ofrecen formación en Diseño o lo Audiovisual han explotado al máximo el stand del que disponían para atraer a los potenciales alumnos.
La masiva afluencia durante los 5 días de Saló de l’Ensenymanent y los 4 de FUTURA confirman el éxito de un evento que esperemos que realmente sus visitantes sepan aprovechar a la hora de elegir su futuro. En la actualidad, no solo se lo muestran de una forma más atractiva de la que generaciones anteriores hubiéramos querido disfrutar, sino que se ofrecen más variedad de vías educativas, así como especializadas que pueden ayudar a que uno encuentre más fácilmente su camino. Hace 20 años era impensable estudiar una carrera en cine sin antes cursar algo que los padres considerasen más «serio», lo que implicaba cursar dos carreras, ahora se han definido los programas y contenidos de tal manera que los padres no pueden poner en duda la seriedad de unas u otras carreras.
Ahora mismo ya en las webs de ambas citas anuales ya podemos ver las fechas del año que viene, sin duda se mantienen actualizados a la velocidad que su ciudad y la sociedad manda hoy en día.